7/2/20

Scavenger - La Celda de los Gángsters


Scavenger
Sala: La Celda de los Gángsters
Dirección: C/ de la Palma, 14, Madrid 


Visítales: scavengerescape.com


Valoración de Los Bichos


Nuestra experiencia

¿A quién no le gusta una sala con un toque picante y ambientada en el mundo de los gangster? Si os atrae la temática, Scavenger ofrece una sala exactamente para ello, se trata de La celda de los Gangster. Dejad vuestros tabús a un lado y adentraos en ese mundo inmoral:

Estados Unidos en los años 20, a pesar de su prohibición, los juegos de azar y la prostitución está floreciendo. Como mucha gente, la hija única del mafioso Salvatore Maranzano, Elizabetha también se ha sumergido en este mundo inmoral. Tu misión es entrar a la cueva del enemigo y encontrar la prueba comprometedora antes de que ellos lleguen a casa. 

No era la primera vez que íbamos allí así que nos conocíamos el lugar y las instalaciones. Además no estábamos solos, si no que formamos equipo con Paula y Sebas. Cuando llegamos allí nos recibieron en la recepción y nos indicaron donde dejar nuestras cosas. Nos sentamos en la recepción y esperamos a ser atendidos. Si no queréis spoilers no escuchéis mucho al resto de Game Master que están allí ayudando al resto de equipos mientras juegan. Ya con las normas básicas repasadas fuimos al interior de la sala donde recibimos el briefing inicial. Nosotros no somos muy partidarios de entrar de esa forma a la sala ya que se pierde el momento de impresión inicial. Se nos hizo un poco larga la introducción una vez allí, además recibimos una lista bastante larga de las cosas concretas que no se pueden hacer. Nos parece que esto saca un poco del papel y sería fácil de resolver reforzando algunos elementos para que esté a prueba de los grupos menos delicados.

Cuando la Game Master finalmente abandonó la sala, comenzó verdaderamente la aventura. La primera estancia no es excesivamente grande pero entran sin problema grupos de cuatro o cinco integrantes. Además según se avanza se descubren nuevas estancias y muchas opciones de diversión. La ambientación está centrada en los años 20 y en un entorno mafioso. En concreto la primera sala tiene algún detalle de la ambientación que nos llamó la atención por lo bien que encajaba con la historia pero como decimos, nos pareció que algunos elementos deberían reforzarse para evitar sustos y tener libertad de juego. Durante la experiencia nos encontramos con varios elementos que permiten mucho juego y favorecen a la ambientación. Es una sala para pasarlo bien, dejarte llevar un poco y aprovechar para interactuar y jugar. No dispondremos de un control del tiempo que llevamos de juego, así que será necesario no despistarse demasiado.

Se trata de una sala donde se mezclan los mecanismos y los candados más clásicos. Es muy importante interactuar con el entorno y dejar la vergüenza atrás. Por lo general no son pruebas difíciles, nosotros consideramos la sala como nivel medio-bajo de dificultad. Como en el resto de sus salas que habíamos jugado, si necesitamos ayuda la recibiremos a través de un interfono que se encuentra en la primera sala. Esto nos pareció que no termina de encajar con la historia y que además, dado que todos los juegos se llevan desde el mismo sitio, puede no escucharse de manera correcta la pista que nos envian. En cualquier caso nosotros no tuvimos que darle mucho uso en esta ocasión.

Nosotros empezamos bien, bastante fluido y dividiéndonos bien el trabajo (aunque se trata de una sala bastante lineal en la que prácticamente todo el equipo deberá trabajar en el mismo enigma). Nos atascamos en un mecanismo que no terminó de funcionar bien del todo pero después de insistir un poco, pudimos seguir adelante. Según avanzábamos íbamos cogiendo velocidad y al final conseguimos nuestro objetivo ¡con un tiempazo! Nos lo pasamos bien durante el juego, riendo, bromeando entre nosotros y comentando todo lo que nos encontrábamos. Nos gustó jugar una temática algo diferente a lo normal.

Al salir hicimos un repaso rápido por la sala riéndonos de nuestro momentos más surrealistas y nos sacamos una foto de recuerdo tanto dentro como fuera de la sala (aunque solo compartiremos la de fuera para no desvelar nada de la ambientación). Aún nos quedan varias salas de Scavenger por jugar así que dentro de poco seguro que estamos otra vez por allí.

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