Sala: Misión S.W.A.T
Dirección: Carrer de la Travessera, 10, Cornellà de Llobregat, Barcelona
Visítales: openmindroomescape.es
Cuando reservamos en Open Mind sabíamos que nos esperaba algo muy bueno. Todo lo que leíamos sobre la sala eran buenas valoraciones y comentarios de gente que había salido encantada, por lo que estábamos deseando que llegara la hora para probarlo por nosotros mismos. Ya habíamos hablado con Aitor, creador de la sala, y la verdad es que el buen rollo que desprendía solo incrementó nuestras ganas de convertirnos en verdaderos S.W.A.T. (un saludo muy grande!!)
Llegamos media hora antes de nuestra hora (algo que no es muy común en nosotros) así que decidimos matar el tiempo pensando en qué podría esperarnos dentro de la sala. No podéis imaginar la de cosas que pasaron por nuestra cabeza jajaja. Antes de entrar os recomendamos ver el pedazo de vídeo que han montado, todo ayuda para meterte en situación y la verdad es que se agradece un montón. Lo podéis ver AQUÍ.
¡Y por fin llegó la hora! Nos pusimos delante de la puerta de Open Mind y llamamos... Nos recibe un verdadero S.W.A.T al que no le falta detalle. Nos hace pasar al local rápidamente por si alguien nos ha visto llegar y nos da el uniforme reglamentario con el que nos hace nuestra foto. Todo está muy pensado e hilado con la historia y nos gusta que siempre se le de un giro a las cosas, ya lo entenderéis ;) La forma de recibir las últimas instrucciones nos parece una idea genial, te hace permanecer en tu papel de S.W.A.T sin desviarte ni un poco de la historia.
Nuestro compañero John fue asesinado por una célula terrorista y ahora, 10 años después, está célula se ha rearmado. ¿Seremos capaces de reducir y eliminar a esta célula y así honrar la muerta de nuestro compañero John?
¡Por supuesto que sí, manos a la obra! Y nada más empezar nos encontramos con lo de siempre, ¿como describir una ambientación tan brutal sin spoilers? Todo está cuidado al detalle, la ambientación es muy realista y permite la manipulación de absolutamente todo. Nos gustó mucho no tener que andar pensando si esto se puede tocar o no. Las diferentes fases por las que pasa el juego nos parecieron muy auténticas y se nota el trabajo que hay detrás de cada una. Sin duda la ambientación es uno de los puntos que más destacaríamos de este escape room, no os lo podéis perder.
Con respecto a los enigmas o puzles, el poder jugar con toda la sala hace que alguno de los enigmas sean muy reales y te preguntes si realmente puedes hacer eso. Con uno de ellos, Bicho se sintió especialmente emocionado y es una de las cosas que más recuerda de nuestra aventura por Barcelona. Consideramos que la dificultad está ajustada al tiempo, aunque no te puedes despistar y por supuesto no puedes parar ni un segundo. Para nosotros, los 80 minutos que tienes para conseguir la misión fueron los más rápidos que hemos visto nunca.
Al final conseguimos la misión y detener a la célula terrorista, aunque según nos comentó luego Adrián utilizamos algún truquillo que no tenían contemplado (algo que seguro que ya han cambiado). Queremos destacar el papel de Adrián, nuestro Game Master, que consiguió que nos metiéramos en la historia y nos supo guiar en todo el juego sin despistarse ni un solo momento. Tras charlar después con él pudimos fijarnos en algún detalle que se nos había escapado y hablar sobre diferentes experiencias. Una pena no haber podido quedarnos más rato con él porque la verdad es que lo pasamos muy bien pero, Aitor nos estaba esperando en Unreal así que ¡para allá que nos íbamos!
Como resumen, si no habéis probado la sala de Open Mind ¡deberíais! Por muchas opiniones y comentarios que leáis no os vais a hacer una idea de la sala hasta que no la juguéis. Y por supuesto nunca olvidéis la premisa, un S.W.A.T. nunca retrocede.
Llegamos media hora antes de nuestra hora (algo que no es muy común en nosotros) así que decidimos matar el tiempo pensando en qué podría esperarnos dentro de la sala. No podéis imaginar la de cosas que pasaron por nuestra cabeza jajaja. Antes de entrar os recomendamos ver el pedazo de vídeo que han montado, todo ayuda para meterte en situación y la verdad es que se agradece un montón. Lo podéis ver AQUÍ.
¡Y por fin llegó la hora! Nos pusimos delante de la puerta de Open Mind y llamamos... Nos recibe un verdadero S.W.A.T al que no le falta detalle. Nos hace pasar al local rápidamente por si alguien nos ha visto llegar y nos da el uniforme reglamentario con el que nos hace nuestra foto. Todo está muy pensado e hilado con la historia y nos gusta que siempre se le de un giro a las cosas, ya lo entenderéis ;) La forma de recibir las últimas instrucciones nos parece una idea genial, te hace permanecer en tu papel de S.W.A.T sin desviarte ni un poco de la historia.
Nuestro compañero John fue asesinado por una célula terrorista y ahora, 10 años después, está célula se ha rearmado. ¿Seremos capaces de reducir y eliminar a esta célula y así honrar la muerta de nuestro compañero John?
¡Por supuesto que sí, manos a la obra! Y nada más empezar nos encontramos con lo de siempre, ¿como describir una ambientación tan brutal sin spoilers? Todo está cuidado al detalle, la ambientación es muy realista y permite la manipulación de absolutamente todo. Nos gustó mucho no tener que andar pensando si esto se puede tocar o no. Las diferentes fases por las que pasa el juego nos parecieron muy auténticas y se nota el trabajo que hay detrás de cada una. Sin duda la ambientación es uno de los puntos que más destacaríamos de este escape room, no os lo podéis perder.
Con respecto a los enigmas o puzles, el poder jugar con toda la sala hace que alguno de los enigmas sean muy reales y te preguntes si realmente puedes hacer eso. Con uno de ellos, Bicho se sintió especialmente emocionado y es una de las cosas que más recuerda de nuestra aventura por Barcelona. Consideramos que la dificultad está ajustada al tiempo, aunque no te puedes despistar y por supuesto no puedes parar ni un segundo. Para nosotros, los 80 minutos que tienes para conseguir la misión fueron los más rápidos que hemos visto nunca.
Al final conseguimos la misión y detener a la célula terrorista, aunque según nos comentó luego Adrián utilizamos algún truquillo que no tenían contemplado (algo que seguro que ya han cambiado). Queremos destacar el papel de Adrián, nuestro Game Master, que consiguió que nos metiéramos en la historia y nos supo guiar en todo el juego sin despistarse ni un solo momento. Tras charlar después con él pudimos fijarnos en algún detalle que se nos había escapado y hablar sobre diferentes experiencias. Una pena no haber podido quedarnos más rato con él porque la verdad es que lo pasamos muy bien pero, Aitor nos estaba esperando en Unreal así que ¡para allá que nos íbamos!
Como resumen, si no habéis probado la sala de Open Mind ¡deberíais! Por muchas opiniones y comentarios que leáis no os vais a hacer una idea de la sala hasta que no la juguéis. Y por supuesto nunca olvidéis la premisa, un S.W.A.T. nunca retrocede.
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